miércoles, 24 de junio de 2009

“Un cambio inminente, el uso de las nuevas tecnologías en la educación.”


Resumen:

La utilización de las nuevas tecnologías en la educación, impone un cambio inminente, el cual, los involucrados de este proceso están obligados a asumir con responsabilidad para que pueda convertirse en un verdadero motor que impulse las mejoras que, durante décadas se han buscado en este ámbito del conocimiento.


Palabras clave:

Tecnologías de la comunicación, cambio, docente, alumno, enseñanza, aprendizaje.



El desarrollo tecnológico generado en los últimos años, ha traído cambios vertiginosos en distintos ámbitos de nuestra vida, la educación no ha escapado a ellos y actualmente se encuentra en un proceso de apropiación y uso de nuevas tecnologías de la comunicación que no sólo busca adaptar, sino también desarrollar, específicamente, como tecnología educativa que apoye el proceso educativo de enseñanza aprendizaje de una manera práctica y sobre todo eficiente. De acuerdo a información proporcionada por la ANUIES “A partir de la década de los 70’s se amplían las acciones, instituciones y programas que buscan alternativas educativas a la educación presencial. Desde esa época es que se observan tanto a nivel nacional, regional y estatal experiencias muy enriquecedoras.” (En http://www.anuies.mx/e_proyectos/pdf/vir_mx.pdf). Ante estos cambios, resulta inminente que los involucrados en este proceso asuman nuevas formas de aprender y de enseñar y, en lo posible modifiquen sus hábitos, disciplinas y dinámicas de trabajo adoptando la tecnología, no únicamente como un reemplazo del lápiz, papel o pizarrón, sino como una herramienta novedosa y práctica, como lo menciona Popert (1995), con la utilización de las nuevas tecnología en la educación, se produce un punto de inflexión que apunta a generar un megacambio en el proceso enseñanza aprendizaje. El desarrollo de materiales, aprovisionamiento de recursos, desarrollo de una didáctica específica, requiere una nueva visión académica y asimilación de tecnología para llegar en última instancia, a los estudiantes, principales beneficiarios de estos cambios. En este proceso, el docente lleva la parte más importante, ya que es quien fomenta su uso y quien implementa los recursos. Tal es así que se puede decir que, actualmente se requiere una nueva formación docente en la que se priorice el aprendizaje del alumno y se puedan utilizar la Nuevas tecnologías como agente de cambio.



El papel del docente.


En esta nueva dinámica educativa el docente es quien tiene la responsabilidad de asumir con mayor fuerza el cambio, esto implica primero, una capacitación expresa en la utilización de los recursos tecnológicos específicos de educación, una forma ágil de transmisión de información y sobre todo, la adecuada implementación del proceso de comunicación y uso de nuevas tecnologías con los alumnos. La capacitación expresa no siempre se obtiene en los cursos normales universitarios, requiere un acercamiento a instituciones educativas específicas e implica interés del docente por adquirir y desarrollar habilidades que le permitan incrementar su potencial académico.

La utilización de recursos tecnológicos, ya sea dentro del aula o a distancia, supone una gran creatividad y dinamismo por parte del docente, ello conlleva amplios conocimientos de su especialidad, del manejo de recursos y de su proceso comunicativo. “Los docentes necesitan estar preparados para empoderar a los estudiantes con las ventajas que les aportan las TIC”. (En http://www.eduteka.org/pdfdir/UNESCOEstandaresDocentes.pdf ). Estas habilidades son requeridas para que el nuevo modelo educativo funcione, porque el docente será capaz de conducir al estudiante hacia el alcance de sus metas u objetivos de aprendizaje, apoyándole en la construcción de su conocimiento, mediante la utilización óptima de recursos, adecuando cada herramienta al contenido temático y a la comprensión específica del estudiante, para ello puede valerse de una motivación continua, que genere interés en los alumnos por el uso del recurso tecnológico. Un elemento esencial con que cuenta el docente, es la posibilidad de realizar evaluación formativa, apoyando al alumno con retroalimentacion permanente a su trabajo, esto también le proporcionará elementos que ayuden a la promoción del uso de la tecnología a la vez que apoyan su proceso de aprendizaje. “Es necesario tomar conciencia de una vez por todas, y adoptar una serie de medidas que vayan más allá de la dotación de ordenadores para conseguir que la incorporación plena de las TIC a los centros educativos contribuya de manera decidida en la mejora del proceso de enseñanza y aprendizaje. (Pariente.A, p.2)

Por último, es determinante la forma en que el docente lleve a cabo el proceso de comunicación con el estudiante, ya que de él depende la motivación, la retroalimentación y las indicaciones pertinentes y precisas para el uso de la tecnología, de este modo la fluidez y destreza con que el docente se maneje serán punto clave para apoyar al alumno en este proceso de asimilación de tecnología. Con preparación continua y una visión ágil, dinámica y creativa, el docente podrá tener elementos de sobra para apoyar de manera eficiente el proceso de aprendizaje del estudiante.



El papel del alumno.


Al asumir un cambio en la educación, se presenta la posibilidad de contar con un nuevo alumno, no se puede decir que la generación de este cambio es lo que dará origen a este nuevo alumno, porque tal vez este nuevo alumno es quien requiera la implementación de las nuevas tecnologías en la educación, tal como lo menciona Cabero, J (1994). “Tenemos que se conscientes que las NT requieren un nuevo tipo de alumno. Alumno más preocupado por el proceso que por el producto, preparado para la toma de decisiones y elección de su ruta de aprendizaje.” En un inicio se mencionó que el mundo ha cambiado y que a nuestro alrededor tenemos nuevas formas de llevar a cabo nuestra vida cotidiana, los alumnos que actualmente se incorporan a los diferentes sistemas educativos tienen en su mayoría habilidades desarrolladas para el manejo de las nuevas tecnologías, particularmente de la computadora. Sin embargo, hablando del alumno, no sólo se requiere buen manejo de la tecnología, sino también compromiso con la adquisición de su propio aprendizaje, el docente apoya esta formación como lo menciona Adell, J., una de las principales tareas del formador consiste en ayudarlos a ser autosuficientes, contribuir a la construcción colectiva de conocimientos. Hoy en día los procesos educativos se encuentran centrados en el sujeto que aprende, ello conlleva que el estudiante, apoyado por el docente, sea quien desarrolle las habilidades y competencias necesarias para determinados fines, estos fines, definidos por la institución educativa, conducen al alumno a ubicarse en mejores posiciones a lo largo de su vida. De ahí la importancia que el estudiante desarrolle una conciencia de lo que desea alcanzar o realizar, necesaria para asumir un compromiso con sigo mismo y con la construcción de su conocimiento. Nuevamente podemos revisar la figura docente como generadora de este cambio necesario en el alumno, la conciencia de adquirir el propio aprendizaje y la utilización óptima de las nuevas tecnologías para lograrlo son pieza clave en la educación de nuestro tiempo.

El alumno actual que utiliza las nuevas tecnologías en su proceso educativo, tiene la opción de ingresar al ancho mundo de la información, razón por la cual requiere una excelente guía para comprender y manejar aquello que requiera, con un sentido crítico y responsable que le ayude a determinar y seleccionar lo necesario para llevar a cabo su proceso de aprendizaje.


Para concluir, la comunicación, como base de todo proceso educativo, sufre cambios significativos ya que se modifica en la elaboración y distribución de los medios de comunicación, se crean también nuevas posibilidades de expresión y se desarrollan nuevas extensiones de información. Lo anterior se explica porque el alcance educativo tiene la posibilidad de ampliar sus horizontes al mundo entero de una manera confiable y apuntando a englobar una gran diversidad de culturas que aporten elementos de estudio y desarrollo en las diferentes comunidades educativas.

De los cambios generados en el ámbito de la comunicación se desarrolla obligadamente otro en el ámbito educativo, el asumirlo con responsabilidad permitirá llevar a cabo, avances en el proceso enseñanza aprendizaje de una manera significativa y eficiente. Dos son las figuras importante para llevar a cabo este cambio, por una parte el docente actuando como motor y por otro el estudiante como producto de este cambio. De este modo se entiende que entre más concientemente asumamos el cambio generado por la penetración de las nuevas tecnologías en el ámbito educativo, quienes estamos involucrados, tendremos una oportunidad mayor de contribuir con el desarrollo de la educación y llevar a cabo prácticas innovadoras, producto de nuestra creatividad y compromiso con la educación del presente y el futuro.

Referencias

Adell, J y Sales, A. El profesor online: elementos para la definición de un nuevo rol docente. Recuperado el 4 de marzo de 2009, de http://www.ice.urv.es/modulos/modulos/aplicaciones/articul1.htm

“Propuestas para el desarrollo de la educación superior en modalidades educativas no convencionales” (2003). Recuperado el 25 de mayo de 2009, de http://www.anuies.mx/e_proyectos/pdf/vir_mx.pdf

Pariente, A. Hacia una auténtica integración curricular de las tecnologías de la información y comunicación, Recuperado el 11 de mayo de 2009 de http://www.rieoei.org/deloslectores/1055Pariente.pdf

Estándares Unesco de Competencia En Tic Para Docentes,(2008) recuperado el 1 de Mayo de 2009, de http://www.eduteka.org/pdfdir/UNESCOEstandaresDocentes.pdf

Cabero, J. (1994). Nuevas tecnologías, comunicación y educación. Recuperado el 20 de abril de 2009 de http://tecnologiaedu.us.es/revistaslibros/12.htm

Papert, S. (1995). La máquina de los niños. Replantearse la educación en la era de los ordenadores. Barcelona: Paidós

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